La guía del autocuidado para hombres
Michael O’ Brien, el experto en autocuidado de hombres de Lush, se coronó con el título «barba del norte» en el Beardfest de Liverpool, un festival de barbas, así que sabe unas cuantas cosas sobre ellas, el pelo y el cuidado de la piel. En este artículo nos da las claves para tener un aspecto increíble.
Hemos vivido la época de la metrosexualidad y la retrosexualidad. ¿En qué momento estamos ahora? Creemos que en un punto intermedio. El número de hombres que se cuidan ha aumentado en los últimos años. Se ha convertido en algo esencial el hecho de tener una colección de cosméticos para lucir bien y es probable que sea algo que continúe. Te traemos algunos de nuestros productos favoritos para que estés radiante.
Rostro
Limpiar la cara es la forma perfecta de empezar el día. Coge un poco de Ocean Salt y masajea por toda la piel húmeda. La sal gruesa te exfoliará y acabará con todos esos pelos enquistados. La manteca de aguacate y el aceite de coco suavizarán, y el vodka (sí, vodka) y la lima harán que la piel brille y esté tonificada. Así que sí: estarás aseado y colmado de buenos ingredientes.
Mascarilla
Ponerte una mascarilla a la semana hará que tengas una piel sana, que luches contra cualquier problema cutáneo y que estés tan estupendo como el propio Bruce Wayne. Mask of Magnaminty es la forma perfecta de redondear una rutina facial. El pipermint refrescará la piel y estimulará el flujo sanguíneo; el caolín te limpiará profundamente y acabará con las impurezas y la miel antibacteriana es la guinda del pastel: se trata de un ingrediente limpiador y acondicionador que también actúa como conservante natural.
Hidratación
Una vez que te has tratado la piel, la querrás proteger, ¿verdad? Pues ese es el trabajo de las hidratantes faciales. Cosmetic Lad calma e hidrata con aloe vera y hierba de trigo, mientras que Celestial te aporta una hidratación suave gracias a la manteca de cacao y al aceite de almendra. Vanishing Cream es una crema facial que no da grasa llena de hamamelis curativo y manteca de karité ligeramente hidratante. Tu piel sabrá qué crema elegir entre la gran variedad que tenemos. Escúchala.
Afeitado
El afeitado, bien porque lo necesites o bien porque quieras hacerlo, pone a la piel un poco a prueba. La labor de nuestras cremas de afeitado y jabones es proporcionar una capa protectora entre la cuchilla y la piel, además de suavizar el propio pelo. La calmante manteca de karité de la crema de afeitado Dirty le echa una mano a la cuchilla y suaviza la piel, mientras que la leche de avena y la lavanda la calman y la dejan bien cuidada una vez que has terminado de afeitarte. Una cuchilla afilada es muy importante (cambia las hojas con frecuencia); enjuágala a menudo en agua caliente para que no se tapone y para que pueda deslizarse suavemente por la piel.
Cuidado de la barba
¿Evitas la cuchilla? ¿Te estás dejando tu propio bosque facial? Michael, el ganador del título «barba del norte», nos cuenta que su producto imprescindible es el hidratante capilar Revive: «Me lo aplico todos los días en la barba. El aceite de oliva virgen extra hace que el pelo se mantenga fuerte y que no se quiebre, ni que las puntas se rompan, y la manteca de cacao hidrata. Es un producto perfecto».
Cuidado del cabello
El champú Wasabi Shan Kui está repleto de wasabi y puré de rábano picante para estimular el cuero cabelludo. Masajear el champú por el pelo húmedo estimulará el flujo sanguíneo y supondrá una limpieza profunda. Pero la cosa no acaba ahí: ¡que no se nos olvide acondicionar! Las fresas frescas, la miel y la vainilla se combinan en nuestro acondicionador American Cream para hidratar el pelo sin apelmazarlo. Acondicionar después de lavar es la mejor oportunidad para que el pelo absorba todos los ingredientes hidratantes y fortalecedores que ofrece el acondicionador. Aclara y sécate. Úsalo siempre que utilices el champú.
Nuestras combinaciones para el cuidado capilar son infinitas; pero no te preocupes, porque serán tu piel, tu pelo y tu cuero cabelludo los que te dirán lo que necesitan exactamente.